Diseñar un hotel es una experiencia de inmersión.
Imaginar espacios vitales virtuales y orgánicos que respeten el entorno y el contexto en el que se crean es, sobre todo, un reto de escala, un diálogo entre luz, materiales, superficies y objetos.
D O M A I N E D O L O M I E U:
El trabajo realizado en el Domaine Dolomieu está orientado a lo esencial. A través de 3 universos, la decoración interior se ha adaptado a un estado de ánimo, a una forma de vivir en este lugar que es a la vez contemporánea y rústica. Rodeado de árboles centenarios, el hotel reclama una estética de materialidad y humildad. El proyecto encontró su lugar diseñando mundos derivados de la filosofía del bienestar en otros países (Dinamarca, Japón, India). A través del diálogo, a través de contrastes mínimos.